El disco obtuvo su nombre porque fue en unas cabinas insonorizadas ubicadas en el Teatro Jorge Eliécer Gaitán, en la calle 22 con Séptima, donde el grupo concibió las canciones entre 1994 y 1998, cuando ese espacio se convirtió en su ensayadero. Durante ese tiempo, los alrededores, incluyendo lugares característicos del centro capitalino como las pescaderías del centro, la Pastelería Florida o la panadería El Cometa, se convirtieron en la cotidianidad de los integrantes de las Almas. También, las imágenes de La 22 buscaban recordar un momento histórico de la ciudad, con impactantes fotografías del bogotazo, capturadas por Leo Matiz, uno de los referentes del arte visual más importantes en América Latina. Hoy día, conscientes del legado que este álbum representa como un reflejo de la vida de Bogotá en décadas pasadas, así como de las limitaciones técnicas de su grabación original, los integrantes de 1280 almas se embarcaron en un ambicioso proyecto hace tres años: ofrecer una experiencia musical renovada a sus seguidores sin perder la autenticidad que hizo de La 22 una obra emblemática de la capital. “Para nosotros es como si por fin hubiéramos terminado La 22. Cuando lo hicimos, no sabíamos que iba a ser un disco tan trascendental, pero cuando la gente nos habla de él nos queda claro que para muchos hace parte de banda sonora esencial de Bogotá”, dice Juan Carlos Rojas, bajista y encargado de esta nueva grabación. El resultado de este proceso es un vinilo titulado La 22 Rebelde, una producción discográfica con la mejor calidad tecnológica de la actualidad, pero sin alteraciones digitales ni autotune. Es un sonido nuevo, para el 2024, con toda la experiencia que los integrantes del grupo han adquirido desde los 90. La 22 Rebelde es el primero de tres álbumes ‘rebeldes’ que publicarán las 1280 almas, discos que hacen parte de esta saga producida de manera independiente, una palabra usada como adjetivo para describir la necedad de la agrupación a lo largo de su historia por resistirse a seguir todas las dinámicas de la industria musical masiva. Aunque las Almas fueron parte de los artistas que firmaron con una casa discográfica en los 90, con el tiempo sintieron que no tuvieron el mismo apoyo que otros artistas e incluso concluyeron que fueron relegados intencionalmente, por lo que tuvieron que descubrir la forma de desarrollar su carrera desde esta posición particular. También, con este álbum, las Almas encuentran un camino para recobrar el uso de su obra musical, independizándose una vez más de sus compromisos pasados, con un fonograma nuevo que representa realmente el sentir de la banda. La 22 Rebelde es una coproducción de La Coneja Ciega y Sonidos La Condesa, la nueva iniciativa de la gestora cultural bogotana Adriana Gonzalez Hassig. Con este disco, La Condesa inaugura su catálogo de colaboraciones con artistas nacionales para que puedan producir ediciones físicas de sus discos, como parte de varias iniciativas que buscan abrir espacios para la apreciación del talento y valor de las músicas de Colombia. Gran ceremonia de entrega de La 22 Rebelde 1280 almas Viernes 7 de junio 9:00 p.m. Teatro Libre Chapinero Carrera 11 No. 61 - 80 Boletería en Atrápalo |